Una grave crisis financiera vive la Municipalidad de Longaví, lo que quedó demostrado en la reciente cuenta pública de la gestión 2016, que rindió el alcalde de la comuna, Cristián Menchaca Pinochet.
Las cifras rojas, heredadas del gobierno comunal anterior, indican un déficit de 3 mil 918 millones 581 mil 578 pesos.
La imposibilidad de pago de las deudas adquiridas y/o reconocidas durante la administración que se inició en diciembre de 2012, llevó finalmente a la renuncia del alcalde en ejercicio de dicho periodo.
El honeroso monto se divide en 2 mil 689 millones 611 mil 578 pesos respecto a deudas judiciales (69%), 995 millones 842 mil pesos en Educación (25%), y 233 millones 128 mil pesos en Salud (6%).
Cabe hacer notar que para cancelar los montos relativos a los juicios, se inició el proceso de licitación pública para la obtención de un Leaseback que permitirá, entre otras cosas, solventar en parte la gran cantidad de deudas adquiridas por la administración anterior, y que hoy en día van en desmedro del patrimonio municipal de todos los longavianos. “Asumimos con dolor dicha decisión, pero estamos convencidos que es de absoluta responsabilidad continuar con esta medida”, apuntó Mancaca.
“Dentro de las facultades que me otorga la Ley, he instruido además, a la fecha, diversos sumarios administrativos para la municipalidad y sus servicios traspasados, a objeto de esclarecer, transparentar y determinar las responsabilidades administrativas que procediesen, respecto a situaciones que hemos detectado y que afectan la trasparencia sobre la gestión y uso de recursos públicos heredados de la administración anterior”, agregó el edil.
Reacciones
Diversas fueron las reacciones de las autoridades que asistieron a esta Cuenta Pública 2016.
El concejal Sergio Pereira dijo que “esperábamos estas cifras negativas, porque ya en el Concejo Municipal nos habíamos percatado de la triste realidad que existe.
Tenemos que hacer un trabajo arduo y que los funcionarios municipales también puedan colaborar para todos ir tirando el carro para el mismo lado y retomemos el ritmo del crecimiento”.
En tanto, el concejal Robin Araya, precisó que “es bueno que la comunidad tenga acceso a esta información. Nosotros ya teníamos conocimiento del déficit lo que es complejo el desafío para ir superando la crisis.
Vamos a realizar un trabajo en unidad con todas las corrientes políticas para salir airosos de este problema”.
El concejal Lisandro Villalobos fue enfático en destacar que “estamos con una sensación de frustración por las graves deudas, lo que impide un crecimiento que queríamos. Estas cifras no fueron dadas a conocer en la cuenta pública de la administración anterior donde junto al concejal Araya lo hicimos notar.
Tendremos que buscar vías de financiamiento externas para mejorar la calidad de vida de los longavianos”.
Por su parte, el consejero regional, Carlos Guajardo, lamentó la situación por la que pasa Longaví, y de paso comprometió todo su apoyo para salir de este impasse, “apoyaremos al alcalde para que la gente tenga avances, porque de esta forma y con proyectos del CORE ayudaremos en parte a alivianar la carga”, apuntó.