La instancia informativa se realizó en la medialuna de la comuna, donde los productores escucharon las oportunidades de comercializar sus productos a un mejor precio y a un mercado mayorista.

Longaví-. Más de 30.000 metros cuadrados y una afluencia de público importante de forma diaria, son los beneficios que tiene la Feria “Lo Valledor” de Santiago, que llegó hasta la comuna de Longaví para ofrecer a los agricultores de sandía y melones mejores ofertas de comercialización de sus productos. Herman Parada, coordinador de la oficina agrícola del municipio local, sostuvo que, “Efectivamente, hemos sostenido una reunión muy importante con los agricultores buscando un nuevo mercado, así que le damos las gracias a Lo Valledor por la buena participación, muy motivadora con premios, y muy entretenido, y lo más importante es la oferta de un nuevo mercado para los agricultores de Longaví, y la verdad es que Longaví tiene excelente productos para enviar hasta la capital, como son los tomates, choclos, sandías y melones, así  que los agricultores tienen una nueva puerta para vender sus cosas”.

Asimismo, la representante del alcalde, Alejandra Harrison, señaló que, “Efectivamente, existe un convenio hace 8 años con Lo Valledor, y hoy día se genera esta primera gran acción con alta convocatoria de agricultores longavianos de sandías, algunos ya tenían algunos contactos y otros que por primera vez se acercan a las instancias municipales, así que esperamos que resulte un gran trabajo de colaboración para que los productores de sandías longavianos puedan comercializar sus  productos en esta red que es el mercado mayorista de “Lo Valledor”.

Finalmente, Mauricio Vásquez, de la localidad de La Caña y productor de sandías hace 17 años, manifestó que, “Es una muy buena idea, ya que como agricultores nos conviene comercializar nuestros productos a un mejor precio, yo llevo 10 años llevando mis productos hasta Santiago y hasta aquí todo bien, así que valoro mucho la presencia de “Lo Valledor” porque da la oportunidad a otras personas a emprender, y yo feliz porque las sandías de Longaví nada que envidiar a las de Paine, son grandes y dulces”.